Una nueva alerta sanitaria surge en España en medio de graves escándalos políticos y económicos: el ébola. Y comienza la carrera para analizar la crisis sanitaria en clave política.
Los falangistas tenemos claro que de esta enfermedad solo tiene culpa la naturaleza. Pero también tenemos claro que de su propagación en territorio nacional, los responsables son el Presidente del Gobierno, y la ministra de Sanidad, complicada en la trama Gürtel, Ana Mato.
El cúmulo de decisiones irresponsables, poco meditadas y peligrosas para la salud pública dio comienzo desde el mismo momento en que se tomó la decisión unilateral de repatriar al Padre Miguel Pajares (DEP), portador del virus, suponiendo un riesgo potencial muy alto para el pueblo español.
El segundo caso de ébola (el primero a nivel mundial contagiado fuera de África) y posiblemente el tercero (en caso de confirmarse el último ingreso) responde a ese cúmulo de decisiones políticas erróneas: si por un lado parece que se ha demostrado que no se guardaron las medidas profilácticas adecuadas, por otro, la sala especializada del Hospital Carlos III (la única capaz de albergar un caso como este) había sido desmantelada y su personal desplazado, durante el proceso de privatización del centro sanitario por parte de la Comunidad de Madrid.
Personal sin formación, cargos sanitarios sin conocimiento de las decisiones que directamente les afectan, material de protección de baja calidad… Estos son los resultados de las políticas privatizadoras del PP. Y por ello Falange Española de las JONS exige:
- Dimisión del Presidente del Gobierno
- Dimisión de la Ministra de Sanidad
- Protección de los trabajadores sanitarios en riesgo de infección
- Activación de un protocolo informativo para el pueblo español
- Procesamiento judicial de los responsables políticos
- Indemnización a las familias afectadas
Falange Española de las JONS