El pueblo español se siente indefenso ante el desafío separatista. Las recientes declaraciones de juez inhabilitado y senador en activo de ERC afirmando que los separatistas hacen uso a su antojo de todos los datos privados de los ciudadanos catalanes ponen en entredicho la actitud del gobierno español, que debería estar al lado de los ultrajados, y no ser una mera comparsa de los desafíos separatistas.
El presidente del gobierno no puede seguir obviando el grave problema de Unidad Nacional que padece España. Debe dar muestras de autoridad ante la levantisca actitud de separatistas y separadores, y dejar de lado el buenismo oficial que impregna las instituciones.
Sin embargo, ante un gobierno títere vacío de poder de decisión y de iniciativa sancionadora, los falangistas nos posicionamos al lado de quienes defienden que sean los propios españoles, tanto catalanes como no catalanes, quienes tomen la decisión de defenderse de la amenaza independentista que solo busca socavar la identidad española y llenarse de dinero sus bolsillos.