Hoy se celebrarán numerosos actos sindicalistas por toda la geografía española. Mitines sindicalistas en los que un número pequeño de burgueses que carecen del sentido revolucionario que debe inspirar un sindicato, intentarán convencer a una cada vez más reducida masa de trabajadores vapuleados por todos los elementos que componen el sistema, de las bondades del régimen.
Los trabajadores sometidos a la reforma fiscal de la derecha española, los trabajadores a los que los bancos les han negado los créditos con los que afrontar sus deudas familiares, los desempleados a los que esos mismos sindicatos que dicen defender, les han robado millones de euros en subsidios en el caso de corrupción de los ERE… Los mismos trabajadores que madrugan cada día para llenar las arcas de un Estado liberal que despilfarra recursos, y que condona las deudas millonarias de los ricos, mientras que se muestra implacable con las pequeñas trampas que deben hacer los pobres…
Pero hoy es 1 de mayo también para otros trabajadores. Para aquellos autónomos casi marginados del sistema de protección social, sobre los que cae la carga, y sin embargo no tienen quien les defienda, pues son tildados por los sindicatos amarillos como “empresarios”. Los trabajadores autónomos españoles, muchos de ellos dependientes, se han convertido en los parias sociales, en aquellos a quienes nadie ayuda, y que vienen atravesando en solitario el desierto de la crisis.
Y por último queremos fijarnos en los desempleados, aquella masa imposible de trabajadores “no retornables”, que a partir de los cuarenta años ve muy difícil su integración en el mundo laboral, que no quiere técnicos cualificados, sino jóvenes sin experiencia e inmigrantes a quienes explotar.
La tiranía que ejerce el régimen neoliberal desde Bruselas se hace notar en España, con terribles consecuencias: contratos basura, sindicatos amaestrados a través de subvenciones millonarias, falta de apoyo a la creación de empresas, fuga de cerebros y de mano de obra cualificada… y lo que es peor, falta de un proyecto independiente e ilusionante, capaz de redimir a los 5 millones de desempleados españoles, a los 11 millones de pobres que malviven en nuestro país, y de reducir la deuda de más del 100 % del PIB que tendremos que pagar durante los próximos años.
Por todo esto los falangistas proponemos este 1 de mayo una verdadera revolución social, desde los postulados nacionalsindicalistas, que nos permita asegurar el trabajo al pueblo español, y que además, permita a un país como España, salir del pozo en el que nos han metido los partidos a izquierda y derecha del parlamento. Con un paro de más del 20% solo comparable en el mundo a Grecia y Sudáfrica, España no tiene medios para hacerlo. Por ello proponemos:
- Nacionalización de la Banca
- Nacionalización del sector energético
- Plan de reindustrialización nacional
- Plan de recuperación del sector pesquero
- Plan de choque para el empleo
- Plan de formación urgente para jóvenes desempleados
- Eliminación de las autonomías
- Salida del Euro
- Renegociación del papel de España en Europa
¡POR UN 1 DE MAYO NACIONAL Y SINDICAL!
¡LOS TRABAJADORES TENEMOS PATRIA!
¡ARRIBA ESPAÑA!
Falange Española de las JONS