La casta lleva años vendiendo España al mejor postor. Desde abundantes propiedades baleares en manos de la poderosa colonia de propietarios británicos, hasta la llegada de China y la compra de deuda española, PPSOE ha hecho todo lo posible por vender activos españoles al mejor postor.
A cambio de una liquidez que permita seguir sacando sobres de comisiones en B, y mantener el tren de vida de los partidos políticos españoles, se abre la entrada a un capital que terminará por adquirir gran parte de las empresas españolas más potentes. Como ya pasara con los grandes monopolios del Estado.
Pero la perversión de este entramado es que el dinero proviene de un régimen comunista que no respeta los derechos humanos, ni laborales. Los jugueteros españoles no pueden competir con el régimen chino, a quien la aún hoy alcaldesa de Madrid abre las puertas de par en par.
La crisis española se acentúa en aquellos sectores productivos que entran en conflicto con el made in China. Por eso los falangistas apostamos por una producción nacional, para fortalecer la industria española, que se garantice que la importación proviene de los países que respeten una legislación laboral similar a la española (aunque ésta cada vez es más restrictiva para el trabajador) y que los artículos posean una calidad acorde a las necesidades del pueblo español.
Falange Española de las JONS