En alguna ocasión hemos llamado la atención acerca de la apropiación del lenguaje joseantoniano por parte de Pablo Iglesias. A no nosotros no nos molesta demasiado. Entendemos que el mensaje de la Falange es tan beneficioso para el pueblo español, que algunas de sus aseveraciones, al igual que muchas de sus realizaciones, forman parte del acervo común de los españoles. Pero nos da pena.
Nos da pena, que los flamantes intelectuales de Podemos, que dan clases de Ciencias Políticas en la Universidad Complutense, y que son marcadamente izquierdistas, no encuentren otro bagaje ideológico que el de un movimiento político que detestan. Porque Podemos, debemos recordar otra vez, pese a que hable de nación, de no ser de izquierdas ni derechas y de que se apropie de medidas falangistas como la inembargabilidad del hogar familiar, no tiene nada que ver con una doctrina tan justa y bella como el nacionalsindicalismo.
No somos como Podemos, porque estamos en contra de ETA, porque sabemos que España es un destino histórico común a todos los españoles, porque estamos a favor de la vida y porque defendemos un modelo tradicional de familia. Pilares lo sufuicientemente importantes, como para considerar que Podemos, al margen de sus medidas de economía social, está muy distante de nuestro nacionalsindicalismo.
Falange Española de las JONS